| Arts & Lettres | Poésie | Démocratie, laïcité, droits | Politique | Féminisme, rapports hommes-femmes | Femmes du monde | Polytechnique 6 décembre 1989 | Prostitution & pornographie | Syndrome d'aliénation parentale (SAP) | Voile islamique | Violences | Sociétés | Santé & Sciences | Textes anglais  

                   Sisyphe.org    Accueil                                   Plan du site                       






samedi 17 juin 2006

Está ocurriendo en la puerta de al lado : desde las chicas incestuosas a las madres alienantes

par Léo Thiers-Vidal, doctorant en sociologie






Écrits d'Élaine Audet



Chercher dans ce site


AUTRES ARTICLES
DANS LA MEME RUBRIQUE


Le livre "Divorce, séparation : les enfants sont-ils protégés ?" Résidence alternée et "syndrome d’aliénation parentale"
Les concepts de syndrome d’aliénation parentale (SAP) et d’enfants aliénés (EA) : sources d’erreur dans les conflits de garde d’enfants
Le Brésil adopte une loi reconnaissant le concept d’aliénation parentale
Les concepts de syndrome d’aliénation parentale (SAP) et d’enfants aliénés (EA) : source d’erreurs dans les dossiers de garde d’enfants
Gardner et la pédophilie
La National Organization for Women dénonce le SAP
Es geschieht ganz in ihrer Nähe : von inzestuösen Mädchen zu entfremdenden Müttern
Ça se passe près de chez vous : des filles incestueuses aux mères aliénantes
Syndrome d’aliénation parentale : le fardeau de la preuve incombe à ses défenseur-e-s
Syndrome d’Aliénation Parentale : la fin du mythe
Une théorie inventée utile au lobby des pères







Por Léo Thiers-Vidal, Doctorando en Sociología

Miércoles 1 de febrero de 2006.

Entre el 27 de febrero y el 1 de marzo de 2006, se está celebrando un curso en Ginebra, organizado por el Instituto de Medicina Legal y las autoridades judiciales de Ginebra, y apoyado por la Sociedad Suiza de Psicología Legal, con el título “Evaluación de la credibilidad de los testimonios de niños en el marco de los procesos penales para abusos sexuales”. Este curso estará dirigido por el Profesor Hubert Van Gijseghem, un psicólogo Belgo-canadiense que, según muchos, representa una de las perspectivas más reaccionarias en el tema de la violencia contra los niños.

El 21 de octubre de 2004, también el Profesor Van Gijseghem dirigió un curso en París sobre una herramienta socio-legal que ha sido ampliamente contestada por protagonistas de la lucha contra la criminalidad pedofílica y contra la violencia contra las mujeres : El “Síndrome de Alienación Parental” (SAP). Para evitar repetir aquí los análisis sobre esta materia, por favor, véase el texto en francés, “Humanismo, criminalidad pedofílica y resistencia masculinista”, publicado y disponible en Internet en :Sisyphe Web Site. Me gustaría recordar someramente que el PAS puede ser considerado como una herramienta extremadamente efectiva contra el testimonio de mujeres y niños que denuncian abusos sexuales en el contexto de un proceso de separación. Tanto hombres de Asociaciones de Padres Separados, como sus nuevas parejas/esposas, como ciertas tendencias en el sector de la educación social, que se encuentran representados en Francia y Bélgica por la Revue d’action juridique et sociale - Journal du droit des jeunes (lit. Cuadernos de Acción Social y Legal, Revista de Derechos de la Juventud), frecuentemente promueven el PAS.

De acuerdo a Pierre Lassus, psicoanalista y director general de la Union française pour le Sauvetage des Enfants (lit. Unión Francesa para la Ayuda a la Infancia), “Las opiniones (de Van Gijseghem), dañan seriamente los avances recientes -que son precarios y frágiles-, en la prevención de los abusos sexuales y el cuidado a los niños víctimas de abuso. En el artículo “The Faurisson of Abuse ?" Pierre Sabourin, psiquiatra, psicoanalista, terapeuta familiar y cofundador del Centre des Buttes Chaumont, escribe que, “Se trata una vez más del negacionismo en funcionamiento. Habitualmente este método - el método Faurisson - intenta probar la realidad de un postulado (demencial como ninguno) utilizando todo tipo de amalgamas argumentales y confusiones. Se trata de un lugar donde tanto intelectuales de la extrema derecha como de la izquierda radical [ultra gauche] pueden reunirse felizmente, pero con prácticas comparables a la más burda propaganda”.
Catherine Marneffe, psiquiatra infantil, y terapeuta familiar e infantil, fundadora y ex directora de SOS-Enfants, Centro de la Universidad Libre de Bruselas, precisa : “el profesor Van Gijseghem se ve atrapado entre la noción de la confesión y la de destape del abuso, siendo que la confesión es un término que se reserva generalmente para aquellos que son culpables, i.e. los abusadores. Al afirmar que ‘es necesario permitir a la víctima callarse después de haber destapado el abuso’, confunde el silencio sobre el acto sexual, que se tiene que respetar, con el silencio provocado por la imposibilidad de expresar con palabras, todos los sentimientos contradictorios causados por el abuso y la situación, y que necesita ser resquebrajada.

Más recientemente, Philippe D. Jaffé, Profesor de Psicología en la Universidad de Ginebra y Presidente de la Sociedad Suiza de Psicología Legal (SSPL), afirmaba lo siguiente con relación a una de las principales referencias ideológicas de H. Van Gijseghem : “La primera razón (por detrás de la controversia) es el personaje que es Richard Gardner. Incluso si, como una hipótesis, el PAS fuera el descubrimiento del siglo, el autor es tan peculiar que es imposible considerar la pertinencia del mensaje sin atender a su mensajero, del cual ciertas teorías son muy cuestionables. La segunda razón detrás de la controversia está también vinculada al personaje de Gardner y a algunas de sus afirmaciones y consideraciones sociológicas. El SAP (Síndrome de Alienación Parental -PAS en inglés-) se trata, en su concepción inicial, de un síndrome que afecta principalmente a las mujeres como progenitores alienantes. El SAP puede ser además considerado como un retroceso de ciertos movimiento de hombres”.

Además, “La alienación parental es un concepto que se utiliza frecuentemente por parte de abogados y/o progenitores sin escrúpulos y que incluso blanden diversas asociaciones de promoción de los derechos de los padres”.

Sin embargo, hoy en día, el mismísimo Philippe D. Jaffé, como presidente de la SSPL, apoya el curso dirigido por Van Gijseghem y declaró el 5 de diciembre de 2005, en el diario suizo 24 heures Région La Côte, “Sí. Durante procesos de separación difíciles, el 90% de las acusaciones de abusos sexuales, no tienen base. Y este síndrome es conocido como alienación parental. El padre/la madre lava el cerebro al niño - en ocasiones bienintencionadamente- para vengarse de su pareja. Y esto lo sesga todo”. Esto parece una conversión “al descubrimiento del siglo” relativamente repentina para un psicólogo que recientemente escribió que, “el síndrome de alienación parental no es un síndrome y debería ser manipulado con mucha precaución”.
Esta conversión revela mucho sobre el poder de atracción que este movimiento ideológico tiene y de los lobbies que lo promueven.

En Francia, ha surgido recientemente una asociación pro SAP que trabaja en colaboración con el Ministerio de Interior, y asociaciones de padres separados, principalmente a través de grupos de trabajo sobre “falsas alegaciones de abuso sexual”. Un hecho reseñable es que entre sus fundadores se encuentra un representante de la nueva/extrema derecha pagana, y esto es necesario que se recalque ya que fue además un adepto a los movimientos celtas el que lideró una violenta campaña contra el psicoterapeuta Bernard Lempert, miembro de la Association pour la Formation à la Protection de l’Enfance - ahora Droit Et Soin (lit. “Derecho y cuidado”) -, quien durante bastantes años se opuso a este movimiento reaccionario. Y lo que es más, este último militante de la extrema derecha fue un antiguo miembro del Frente Nacional (Partido de Extrema Derecha Francés), por entonces miembro del movimiento Troisième Voie (lit. “Tercera Vía”) (derecha extrema radical) y era portavoz para un pequeño movimiento autónomo Bretón. En ambos casos, se dieron acusaciones de violencia contra los niños.

De acuerdo con algunos observadores, el Profesor Van Gijseghem puede haber sufrido una conversión similar a la de Philippe D. Jaffé, tras encontrarse con el pastor Americano y psicólogo, Ralph Underwager, inventor dell “Síndrome de Falsa Memoria” (que principalmente desacredita el testimonio de mujeres adultas que recuerdan abusos sexuales en su infancia). Underwager fue acusado por abuso sexual de su propia hija y defendió públicamente teorías pro-pedo-criminales, pidiendo a los “pedofílicos” que “reafirmaran sus elecciones, rabiosa y orgullosamente”. Van Gijseghem parece ser que conoció a este psicólogo/pastor a comienzos de los 90 durante un juicio en el que ambos practicaban su “otra” profesión, o quizá deberíamos decir, que eran prestadores de servicios en psicología.
Si Van Gijseghem inicialmente había recomendado mantener el vínculo con el padre, cambió totalmente su postura cuando declaró al jurado que la hija se encontraba en grave peligro con el mismo. Este cambio de postura va en la misma línea que la recomendación dada por Ralph Underwager, que negó que hubiera existido ningún tipo de abuso sexual de la hija, por encima de la palabra de la hija que dijo que fue víctima de abusos sexuales por parte de un familiar de su madre. Van Gijseghem cambió su recomendación sin realizar ninguna nueva exploración de la chica o de su padre.

Esta no es la única peculiaridad “metodológica” del informe pericial psicológico de Van Gijseghem. En un juicio en 1993, un hombre acusado de agredir sexualmente a una niña de 10 años (tentativa de violación y tocamientos) fue valorado por Van Gijseghem. Le dio al acusado cuatro tests ostensiblemente “objetivos y científicos, y por lo tanto no-proyectivos” para ser rellenados... ¡en el calor de la propia casa del mismo ! A lo largo del juicio Van Gijseghem afirmó que “no es probable que M.S. hiciera los gestos por los cuales fue acusado (...) Mi ojo clínico no me ha mostrado que exista ningún peligro”.

Pero ni su “ojo clínico” ni sus tests “objetivos” parecen haber funcionado muy bien ya que el acusado posteriormente se convirtió en un agresor en serie (en 1979 había sido sentenciado a una pena de privación de libertad de 6 meses por la violación de una chica de 15 años y también confesó otra violación en Los Países Bajos). Este hombre, M.S., confesó posteriormente no sólo la agresión sexual de la niña de 10 años sino también dos violaciones más y fue sentenciado a un año de prisión. En otro caso de agresión sexual, Van Gijseghem aplicó su famoso análisis del Síndrome de Rosenthal -la versión psicológica de la profecía auto cumplidora- y dijo que había observado múltiples contaminaciones en los testimonios de los niños y juzgó como improcedente la acusación a un maestro de tocamientos y abuso sexual de 17 niñas. Éste fue un error profesional serio dado que en Canadá no se supone que un perito psicólogo tenga que hacer afirmaciones sobre la credibilidad o fiabilidad de los testimonios de los niños (en contra de lo que se hace en algunos países europeos). La Justicia Canadiense, incluyendo la Corte Suprema, confirmó el error profesional cometido por Van Gijseghem, afirmando que “el juez no confundió el objetivo del informe percicial ni abusó de su poder al disponer del mismo”. Se declaró al maestro culpable de 17 de los cargos, las chicas tenían entre 10 y 13 años cuando se cometieron los delitos.

Un último ejemplo demuestra la actitud de Van Gijseghem frente a sus colegas y el desprecio que muestra hacia quienes -madres y médicos- no comparten su perspectiva. De nuevo Van Gijseghem participó como psicólogo perito judicial “para verificar las alegaciones de abuso sexual y determinar que medidas y derechos de visita debería tener el progenitor sin la guarda [en este caso el padre]”. El padre estaba acusado de violar a su hijo de 3 años durante una visita. El veredicto afirmó que “El doctor (Van Gijseghem) apoya que no es apropiado creer el testimonio del niño ya que no es capaz de describir con detalles lo que realmente ocurrió [¡textual !], es decir los hechos que ocurrieron durante el acto por el cual el padre fue acusado. Y añadió que de todas formas, es generalmente imposible probar o no las alegaciones de abuso sexual [¡textual !]. Sugirió que la madre consultase a un psicólogo ya que se temía que su certeza de que el niño sufrió abusos le llevaría a realizar otras acusaciones (...). Mantuvo que ella se lo había inventado todo”. No nos olvidemos que el niño fue sodomizado en varias ocasiones por su padre y que el médico que examinóal niño dijo que “tiene dos fisuras en el ano (...) una apertura anormal del mismo (...), el niño perdió su reflejo de constricción (...), y la mucosa de la membrana anal está aplastada”.
Van Gijseghem respondió a este informe médico diciendo que “no deberían dar mucha importancia a este (informe) porque ella [la médico] ve abusos en la mayoría de este tipo de casos, y [siguió] afirmando que el niño pudo haberse estimulado o mutilado él mismo”. En una conferencia en Lyón (Francia), hace unos años, Van Gijseghem hizo reír a una audiencia llena de psicólogos, trabajadores sociales y jueces, cuando dijo que uno de sus colegas británicos diagnosticaba agresión sexual cada vez que encontraba un niño con estreñimiento.

Y esta era también la línea de argumentación de defensa del padre acusado en el caso recién mencionado... estreñimiento. A la luz de los hechos (tal como se mostraron en el juicio), el Juzgado declaró “la renuncia total del padre G.T. de su autoridad parental sobre el niño B y obligó a que el Estado modificara la partida de nacimiento del niño” para que no tuviera que llevar el apellido de ese hombre nunca mas. Cualquiera puede imaginar fácilmente que decisión habría sido tomada por el Juzgado si el doctor no hubiera observado a tiempo las lesiones anales y solo pudiera apoyarse en las palabras del pequeño, “Papi, culito quema con palito morado”.

Quizá Van Gijseghem estaba poniendo en práctica el viejo dicho de su maestro/pastor/psicólogo, Ralph Underwager, “Es mejor que no se descubra a mil niños que estén siendo abusados, a condenar equivocadamente a una sola persona”. Pero Van Gijseghem parece que junto a sus “metodologías” tiene otras creencias particulares. De acuerdo a Van Gijseghem, “ciertas chicas introducen objetos en sus vaginas o en la vulva, y se hacen daño, y esto no es en absoluto raro entre las niñas” ; “nada distingue a los niños que han revelado un secreto de otros que han permanecido callados” ; “si (el niño) siente que necesita admitir algo, él lo hará”. Hay numerosas observaciones a lo largo de sus escritos que revelan este tipo de particularidades, pero pocos han tomado nota de uno de sus artículos más antiguos, escrito cuando Van Gijseghem tenía 35 años, y que se titula “Incesto padre-hija”. Al leerlo, comienza a tomar sentido su conversión a la escuela de Underwager y Gardner. En aquel momento, Van Gijseghem estaba estudiando a chicas delincuentes, y dentro de estos estudios, él comenzó estudiando a “chicas incestuosas”.

Sólo mencionaré más abajo unas cuantas citas de este artículo, en el que sus palabras son particularmente reveladoras de la ideología reaccionaria que ya adoptó en aquel momento.
“De acuerdo con una muestra representativa de 186 chicas, entrevistadas en instituciones de reforma para jóvenes delicuentes franco-canadienses, encontramos que 52 chicas habían mantenido contactos incestuosos con sus padres (biológicos o adoptivos). Esto significa que el 28% de estas jóvenes delincuentes conocieron a sus padres como objeto sexual”.

“Dentro de esta población, hemos encontrado 52 chicas que se han visto envueltas en relaciones incestuosas con sus padres biológicos o adoptivos”.
“Entre estas 52 chicas, hay 22 cuyas relaciones incestuosas con el padre biológico comenzaron antes de la pubertad, estas relaciones se prolongaron ininterrumpida o intermitentemente durante un largo período, hasta varios años a veces”.

“Las pre-púberes no suelen resistirse a los avances del padre y esto acaba en una relación de larga duración. El incesto puede terminar en algunos casos al final de la pubertad por deseo de alguna de las partes, aunque a veces, el incesto puede continuar por un tiempo indeterminado”.
“El grupo estaba compuesto por un grupo de unas 22 chicas que comenzaron a tener relaciones incestuosas con su padre a una edad que podríamos catalogar de prepuberal, y que puede variar entre los dos y los doce años”.
“Es cierto que para el observador, estas chicas que son ‘victima’ de incesto, aunque muy frecuentemente, si a los inicios, ellas realmente no seducen al padre, si que terminan manipulándole a su antojo. El incesto se convierte para ellas en un poderoso arma para explotarle, chantajearle, recibir dinero y favores, y en algunas ocasiones para encarcelarle.”

“La tasa de homosexualidad podría explicarse mediante la hipótesis de que las incestuosas habrían sufrido un desarrollo psicosexual más primitivo y, que en cambio, serían sujetos sexualmente más indiferenciados”.
“Generalmente, el incesto parece ser un acontecimiento que marca la vida de las chicas, y que en casi todos los casos, deja heridas psíquicas irreversibles”.

El siguiente curso de los magistrados, psicólogos y otros profesionales en la zona de Ginebra podría contribuir a mantener a muchos niños en situaciones de violencia, a criminalizar a numerosas mujeres “alienantes” y exonerar a muchos hombres agresores sexuales. Esta puede ser una de las consecuencias de hecho, del “Caso Outreau”, que muestra el incremento de popularidad en los medios y en las administraciones públicas de este movimiento reaccionario -convertido a la ideología de las “falsas alegaciones”, el “síndrome de alienación parental”, el “síndrome de la falsa memoria”, el “Síndrome de Rosenthal”, etc.

Como anuncia el periodista suizo Pascale Zimmerman, “Mientras que el caso Outreau finaliza en un terrible fiasco y expone el problema de la credibilidad de las declaraciones de los niños en los procesos judiciales [textual !], se está comenzando a impartir un cursillo de formación para psicólogos en Suiza. Las primeras clases comenzaron el fin de semana pasado en Sion. Esto es un extracto de una entrevista a uno de sus principales diseñadores, Philippe Jaffé, profesor de psicología de la Universidad de Ginebra y del Instituto de Criminología y Derecho Penal en Lausana”. Un pálpito me dice que el futuro, al menos para algunas, esta lejos de ser un camino de rosas.
Concluyamos con una frase de Gérard López, psiquiatra, director médico del Centro de Psicoterapia en el Instituto de Victimología de la Universidad de Paris XIII en el departamento de Medicina Forense, “El análisis de las perversas estrategias y la evaluación de las fortalezas y debilidades disponibles, es una empresa difícil y peligrosa. Se necesita desplegar un abanico amplio de esfuerzos considerables para superar las propias resistencias y las de los otros cuando son confrontadas con la ‘violencia inconcebible’. Todas las víctimas que estan bajo el dominio de algo o de alguien encuentran incomprensión por parte de sus familiares y en todos los contactos que tienen con las instituciones. Esto les convierte en doblemente víctimas. Estos niños masacrados no esperan ninguna ayuda del exterior. Saben que los adultos a menudo se callan, incluso cuando aparecen en el colegio llenos de heridas. Miles de testimonios de adultos lo confirman : la negación tiene la piel dura”.

Sin copyright, se recomienda su distribución.

Version

En Sisyphe, Marzo, 2006

Lien : www.redfeminista.org

Version française
English version



Format Noir & Blanc pour mieux imprimer ce texteImprimer ce texte   Nous suivre sur Twitter   Nous suivre sur Facebook
   Commenter cet article plus bas.

Léo Thiers-Vidal, doctorant en sociologie



    Pour afficher en permanence les plus récents titres et le logo de Sisyphe.org sur votre site, visitez la brève À propos de Sisyphe.

© SISYPHE 2002-2006
http://sisyphe.org | Archives | Plan du site | Copyright Sisyphe 2002-2016 | |Retour à la page d'accueil |Admin